Las uvas con las que elaboró esta limitada partida provienen de plantaciones en

vaso; seleccionadas y vendimiadas a mano con una edad media de 50 años. En

esta botella esta recogida la realidad de la viticultura de la alta meseta española.

La vendimia se realizó a mano y en cajas de 18 kilos, en el momento óptimo de

madurez fenólica.

Los suelos son pobres, secos, y con ligera inclinación donde la morfología de la

vid crea un microclima perfecto donde la planta resiste los altos cambios

térmicos.

El resultado: vino tinto con precioso color granate oscuro, bien cubierto, con

aromas a fruta negras, balsámicos, monte bajo y especias en un segundo plano.

En boca es equilibrado, amplio y redondo. El final es cálido y muy persistente.